Si te estás planteando hacer el Camino de Santiago en vacaciones de verano, te damos algunos consejos.
Los auténticos peregrinos anteponen la experiencia del Camino de Santiago a cualquier obligación ya sea trabajo, estudios…, sin embargo, la inmensa mayoría de nosotros debemos adaptarnos a periodos de vacaciones laborales o estudiantiles.
Debemos tener bien claro, que durante el verano el Camino de Santiago suele estar atestado de gente que llegan de todas partes de España, Europa y el mundo, con el único fin de vivir una experiencia única e inolvidable.
Si hace calor, el esfuerzo será mayor, por el desgaste físico que el sol produce tras kilómetros y kilómetros andando, por lo que es muy recomendable llevar abundante líquido y beber de las fuentes por las que nos crucemos.
¡Ah! No olvides llevarte una gorra y ropa ligera y fresquita.
El Camino de Santiago no es una ruta única, sino que existen muchos Caminos de Santiago. El itinerario clásico, conocido como camino francés, une Roncesvalles con Santiago de Compostela.
Otros Caminos llegan a Santiago desde Irún a través del Pais Vasco (el Camino del Norte), desde Mérida pasando por Badajoz, Cáceres, Salamanca, Zamora y León (por lo que fue la Vía de la Plata, una calzada romana) o a través de Portugal, por citar sólo los caminos peninsulares.
Te recomendaríamos hacer el clásico, ya que su ruta transcurre por el Norte de España y el tiempo será más agradable.
Si quiere conocer todas las rutas del Camino de Santiago aquí las tienes.
Para hacer uso de los albergues, es necesario poseer un documento que te acredite como peregrino.
La acreditación puedes conseguirla a través de las autoridades eclesiásticas de cualquier ciudad española o en iglesias, ayuntamientos y comisarias de policia de las ciudades y pueblos del Camino.
En esta acreditación aparece tu nombre y el punto de partida de tu viaje. A lo largo del Camino de Santiago puedes ir añadiendo sellos que acrediten los puntos por los que has pasado. Una vez en Santiago, podrás conseguir la Compostela (documento que certifica que has hecho el camino) en la oficina del peregrino si has recorrido más de 100 kilómetros.
¿Qué ropa te aconsejamos llevar para hacer el Camino de Santiago en vacaciones de verano?
- Calzado cómodo para andar como zapatillas de deporte que sean cómodas, si llueve mejor llevar otro tipo de calzado más resistente.
- Calzado cómodo para descansar después de una larga caminata como las clásicas chanclas de la playa o de estar por casa.
- Un saco de dormir si no vas a dormir en albergues.
- Aislante si vas a dormir al aire libre, hay que ir prevenidos por si no hay camas libres en los albergues.
- Un impermeable para la lluvia, este tiene que cubrir también la mochila por si te cae un chaparrón tu ropa siempre esté lo más seca posible.
- Mínima ropa. Si es verano puedes llevarte tres mudas que puedes lavar diariamente y colgar en tu mochila para que se seque mientras andas. Llévate un par de pantalones cortos para poder cambiarte, tres camisetas de manga corta, una sudadera o jersey por si refresca por la noche, tres pares de calcetines… intenta que tu mochila lleve lo imprescindible con el mínimo peso posible. Tu eres quien lo carga, y según van pasando los kilómetros la mochila va pesando y tus rodillas se resienten.
- Un sombrero o gorra para el sol es fundamental.
- Una cantimplora o la clásica botella de agua. Durante el Camino de Santiago hay fuentes pero a veces no son tan abundantes como podemos pensar. Siempre lleva agua.
- Una linterna
- Un pequeño botiquín para rozaduras, ampollas…
- Móvil y una libreta con direcciones, puntos de interés, teléfonos importantes…
Si sigues estos pequeños consejos, estarás preparado para superar con buena nota el Camino de Santiago en verano.
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¡Disfruta tu viaje sin equipaje!
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