Las ciudades de España durante la Edad Media estaban amuralladas, los habitantes trabajaban fuera del recinto, e iban a dormir al interior de la fortaleza.
El constante crecimiento de la población, hizo que se acabara derribando las murallas y se generaran las ciudades o pueblos que hoy conocemos.
Pero todavía en España hay muchas ciudades o pueblos que conservan en perfecto estado su recinto amurallado, son grandes tesoros que han sabido sobrevivir a través de los tiempos.
Por eso quiero enseñarte…